Para gustos, los colores.
Los más puristas le consideran un retocador de fotos o diseñador 3D, los menos un genio. Es cierto que sus fotos se parecen más a las presentaciones de los videojuegos que a la realidad, pero tras ellas hay un gran trabajo tanto a la hora de realizar el disparo como del postprocesado.
La primera vez que vi sus fotos pensé que eran HDR’s pero en algunas se nota mucho movimiento que sería imposible captar con 3 disparos o más por muy rápidos que los hiciésemos. No obstante algo de alto rango dinámico hay en su trabajo, pues el hecho de disparar con una Mark III le permite unos cuantos diafragmas más que a la mayoría que, bien aprovechados, pueden marcar la diferencia. En la preparación de sus imágenes hace uso de todo tipo de iluminación y trucos que se pueden ver en los videos behing the scenes. También hay un gran trabajo de técnica dodge&burn en la que hay que tener muy buena mano para resaltar las luces y las sombras. De todas maneras, mucho se ha hablado y se sigue hablando del «efecto Dave Hill» por los foros de internet.
A destacar que Dave Hill tiene 29 años, se dedica a la fotografía comercial, reside en California y que sus fotos no pasan, para nada, inadvertidas.